San José Obrero 1 de Mayo

El Papa Pío XII (1876-1958) instituyó la fiesta de San José Obrero el año 1955, para que fuera celebrada el 1° de Mayo de cada año.

Oración a San José obrero compuesta e indulgenciada por S.S. Pío XII.

Oh Glorioso Patriarca San José, humilde y justo artesano de Nazareth, que habéis dado a todos los cristianos, pero especialmente a nosotros el ejemplo de una vida perfecta en el trabajo constante y en la admirable unión con María y Jesús, asístenos en nuestra tarea cotidiana, para que también nosotros, artesanos católicos, podamos encontrar en ella el medio eficaz de glorificar al Señor, santificarnos y ser útiles a la sociedad en la que vivimos, ideales supremos de todas nuestras acciones. Obtenednos del Señor, Oh nuestro muy amado protector, humildad y simpleza de corazón, gusto por el trabajo y bondad hacia quienes son nuestros compañeros de labor, conformidad a las divinas voluntades en los dolores inevitables de esta vida y alegría en su superación, conciencia de nuestra misión social particular y sentimiento de nuestra responsabilidad, espíritu de disciplina y de oración, docilidad y respeto frente a nuestros superiores, fraternidad hacia nuestros iguales, caridad e indulgencia para nuestros subordinados. Quedaos con nosotros en los momentos de prosperidad, cuando todo nos invita a gozar honestamente de los frutos de nuestras fatigas, pero sostenednos en las horas de tristeza, cuando el cielo parece cerrarse para nosotros y los mismos instrumentos de trabajo parecen rebelarse en nuestras manos. Haced que según tu ejemplo, nosotros tengamos los ojos fijos sobre nuestra Madre María, vuestra muy dulce esposa; que en un rincón de vuestro modesto taller, hilaba silenciosamente dejando que una hermosa sonrisa se dibujara sobre sus labios, haced también que no alejemos nuestra mirada de Jesús, que se esforzaba en vuestro mesón de carpintero, para que nosotros podamos así tambien llevar sobre la tierra una vida pacífica y santa, preludio de aquella eternamente dichosa que nos espera en el cielo por los siglos de los siglos. Así sea.
Indulgencia de tres años a los artesanos que, con contrición y devoción, recitaren la oración .(Documentación Católica 13 Abril 1958.)